Un Adiós (el tiempo y olvido de B)

Un Adiós (el tiempo y olvido de B)

No hubo tiempo para nada mas, cuando llego el momento de caer sin tener conciencia de un dolor.

Uno que fluye por en medio de las venas mezclándose con cada impulso que el ánimo trata de dar para salir de su círculo de piedad que nadie oyó…

No hubo tiempo de decir que es lo que pasa acá adentro, como un eco sin rumor de que alguien lo haya podido escuchar.

Un insomnio de alguien más que despierta con el mismo rostro que olvido ocultar…

Porque cuando la herida es más abierta, es menos la gente que lo siente fluir?...

Si hubo un error de mi parte, fue pretender que sentirías algo más que solo una una brisa de consuelo…

Si hubo un error de mi parte, fue tratar de entender que los círculos de amor se cerrarían para acoger en sus brazos una parte de mí, en tus palabras que ausentes solo imitaban el murmullo de toda una vida cargada de decepciones, partidas de sombras que se diluyen en la brisa de un amanecer sin retratos que mirar…

Palabras que se guardan en los bolsillos de cualquier gabardina, al lado de los papeles que hay que desechar para no dejar cuentas de amor por deudas…

Fue la ansiedad lo que nos dejó, la cordura de saber que pudimos ser protegidos de la agonía y el dolor…

No hubo tiempo cuando la fuerza de un recuerdo ajeno a mí, me alcanzo para repetir memorias de una historia oculta para mi corazón.

Espinas que encierran el sueño de latir sin pesadillas que recordar.

Sin la carga de olvidar lo que no se puede sentir…

Sin la cadenas de eventos que te anclan a la piedra de un yelmo que tu no forjaste,

Sino que fue tallado en cinceles negros que picaron el molde no pedido de mi rostro con lágrimas de piel viva, un sollozo de un niño que oculto a los demás

Para no tener recuerdos de una pesadilla de existir con la garganta llena de serpientes que entrelazan entre sus colas una idea repetida de dolor y consuelo sin resolver…

Te adoro pero tu indiferencia es más particular que tu lado de consuelo.

Tallas igual que callas…

En brumas y medias noches que se alzan sobre la indiferencia de muchos que aplauden tu sonrisa de mujer fatal…

Y yo mientras tanto recogiendo fragmentos de una caja que no debió de abrirse, sepultada en las losas de un sueño de un niño que tocado por el miedo decidió

Volverse una pausa, una piedra de un fragmento que alguien lo arranco de una inocencia destilada en los paños de cualquier indiferencia…

Y una brisa que no fue invitada destapa la tenue manta de polvo que oculta una lápida de odio y rencor…

Una fragancia vieja y añeja vuelve a mezclarse en todo el ambiente que cubre de miedo las sonrisas de una larga espera…

Te adoro pero tu forma de ver las cosas son iguales a las ganas que te detienen a pensar sobre tu excusa de sentir algo mas que no sea tu latir…

Fuiste dura y cruel, dejaste en la mesa tus monedas y un beso por alquiler que no devuelve garantías de consuelos robados…

Partiste sin decir nada más que un no deseo molestar…

Porque cuando la herida es más abierta, es menos la gente que lo siente fluir?...

Si hubo un error de mi parte, fue pretender que tú te quedarías para acercar esa fuente de agua que se te da bien olvidar cuando tú la necesitabas y yo te la acerque…

Si hubo un error de mi parte, fue pretender que tu abrazarías a los mismos destierros con que una vez la vida te hizo pagar, fuiste irónica al pensar que alejándote pagarías los mismos favores que extraños sin nombre te dieron de comer cuando las ganas quedaron sepultadas en tus lágrimas de perlas negras ancladas a ningún chance que tu brindaste por fingir que ayudarías al dar un paso atrás de las huellas de este extraño que dejo cuando quedaste varada en la misma isla que lleva tu nombre…

Nombre que ya no se ha de pronunciar…

Nombre que ya se ha de ocultar de todo recuerdo y algo más…

Tenías razón en que tú no das consuelo ni apoyo…

Solo olvidas el mal momento para no saber cómo volver a ser un poco mas, un poco menos algo normal…

No hubo tiempo para nada mas, cuando llego el momento de caer sin tener conciencia de un dolor.

Uno que fluye por en medio de las venas mezclándose con cada impulso que el ánimo trata de dar para salir de su círculo de piedad que nadie oyó…

No hubo tiempo de decir que es lo que pasa acá adentro, como un eco sin rumor de que alguien lo haya podido escuchar.

Un insomnio de alguien más que despierta con el mismo rostro que olvido ocultar…

No hubo tiempo para no despertar de todo lo que se dijo y no se cumplió.

                                                                                  X W.M.