lunes, 21 de junio de 2021

Haiku sobre la Belleza de una Mujer llamada B

 


Haiku sobre la Belleza de una Mujer llamada B

 

Las mentiras van detrás de las corrientes que uno percibe, sobre todo cuando se vuelven brisas en uno….

La culpa nos vuelve de piedra

Y el fatigar de andar con ellas nos da la templanza de cantar entre las pausas una letanía para componer Haikus en los listones del tiempo…

 

Talvez…

El aire que respiras?…

La mano solitaria que te acompaña?

La fragancia de su aroma sin que él o ella la acompañe?...

 

Si te limitas a ser una forma que nadie pueda descifrar; se sobre entiende que estamos vivos en ellos?

Nos volvemos uno con su pensar?

Somos espacios entre sus espacios…

Vacíos absolutos que nos unen los eones del tiempo?

O solo bruma de un fatigar en nuestros suspiros

Por alguien que no nos respira nuestro aire?...

Seremos algo más que lo que no soñamos?

Fragancias que recodamos sin sentir la dulzura de su pesar…

O la ceniza de la que deja un corazón sin respirar, el fuego de su calor en nuestra piel?

Leves intenciones que se declaran así mismas libres de oportunidades…

 

O tal vez… solo no le perteneces ni tampoco te recordara o hay algo más?...

 

Mi verdad es lo que queda en tu reflejo dentro de ti….

Mi verdad es lo que dejas allá cuando dejo de respirar….

Mi verdad es lo que clama tu silencio cuando no me atrevo a decirlo, sin que tus labios se vuelvan pequeñas sentencias de mi actuar…

Esa mueca que dibuja tu pesar para aceptar lo que calumnie de tu sentir; acaso tu aprobación para ser siempre tu consentido en tu egoísmo espiritual…?

La pequeña muestra de querer seguir aunque las aguas hayan cambiado la marea.

La necedad de ser algo que no quieres que sea, y que con el tiempo la apruebes y demandes para confrontar lo que tus culpas se tatúan en mis intenciones aunque estas sean proscritas para ti y para el ara que esculpe la piel de piedra de tu celada intención de amor y odio…

La intención de esculpir el vidrio del alma sin quebrarla por mi fuego ni tu celo…?

 

O tal vez… solo no le perteneces ni tampoco te recordara o hay algo más?...

 

La plenitud de una mujer es extrema cuando las aguas y el viento se hacen uno en una caricia sin ser dueñas…

Sin batallas, sin un porque, sin un esperar, sin una razón que la caracola del océano la perturbe a ella, para escuchar su nombre en el eco de los eones del tiempo…

En esa intención que ella pretende olvidar por una razón salida del miedo y que tu en suspiros le repites las formas en que debe recordar tu nombre sin ser susurrado en su labio de piedra…

La vanidad se viste con los colores que dibuja la mente, no necesitan ser creados solo intencionados y de ellos toda la luz se dispersa para crear el ruido de protección entre el orgullo y la vanidad de una mujer con pasión en el corazón…

El más blanco de los inciertos que la calumnia pueda decir cualquier frase para boicotear el amor de una mujer con fragancia de intención de dejar de ser en inciertos al mundo por la voluntad suya y nunca poseída de su eterna lucha flor de cerezo entre invierno y primavera…

 

O tal vez… solo no le perteneces ni tampoco te recordara o hay algo más?...

 

Las mentiras van detrás de las corrientes que uno percibe, sobre todo cuando se vuelven brisas en uno….

La culpa nos vuelve de piedra

Y el fatigar de andar con ellas nos da la templanza de cantar entre las pausas una letanía para componer Haikus en los listones del tiempo…


                                                                            x W.M

 

 

 

 

 

 

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